Hola a todos. Esta vez el blog va de autobombo, pues me apetecía tocar mi tema: la pintura, pero dándole un giro.
No voy a hablar de pintura formal, de caballete, sino de los usos que tiene la pintura en decoración… ains, miles!
Antes de meterme en materia, voy a tirar una lanza a favor del uso de la artesanía en decoración.
Los contratistas y decoradores están tendiendo a utilizar más los trabajos mecanizados, porque aportan soluciones prácticas y baratas (o dejan mayor margen económico al proveedor, la mayoría de las veces); peeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeero ya sabéis lo que yo opino: como la mano de un artesano no existe para darle originalidad, personalidad y exclusividad a las cosas.
No nos volvamos locos pensando que artesanal es igual que clásico, la experiencia de un artesano se puede aplicar a conceptos actualizados.
Ebanistas, ceramistas, tejedores, especialistas en forja, pintores, escayolistas… en fin. Si estáis pensando darle una vuelta a la decoración de vuestra casa, no obviéis a los artesanos, porque pueden ofreceros soluciones singulares y no necesariamente más caras.
Volviendo al tema de hoy, os quería comentar un poco cómo utilizamos nosotros la pintura de forma decorativa.
Ya que he hemos hecho pinturas murales, diseñado biombos pintados, y nos gusta hacer virguerías con los muebles, hay mucho de lo que hablar.
Pero necesito dar unas pinceladas primero al tema del color de las paredes…
Claves para elegir bien los colores de tus paredes
• Primera premisa: tienes que combinar los colores de suelo, pared y puertas. Elige uno como punto de partida (suele ser el suelo, porque es el menos modificable, y es lo que más se ve), y en función de lo que busques conseguir adapta el resto.
Dicho esto, puedes poner todo en colores de la misma gama (si buscas armonía, serenidad, amplitud), o buscar el contraste (más arriesgado, y más divertido). En este segundo caso, intenta que haya algo de coordinación: una gama de colores para pared, y otra para puertas. Y recuerda, que casen siempre con el suelo.
• También debes seleccionar los colores teniendo en cuenta el mobiliario de la habitación: ojo, antes de enamorarte de un color, ten esto en cuenta.
Para maderas oscuras, la pared debe ir en un color que no compita con ellas. Colores intensos en la pared quedarán apagados en contraste con estas maderas. En este caso funcionarán mejor los tonos neutros.
La gama de blancos es ideal para imprimir estilo “nórdico “ a las habitaciones. Lo puedes alegrar poniendo color en otros elementos (columnas, cornisas).
• No olvides tener en cuenta las características (tamaño, iluminación) de la habitación. Igual pretendemos buscar un efecto determinado, (como por ejemplo, crear profundidad poniendo una pared oscura) y conseguimos justo lo contrario.
• Importante, haz siempre una prueba y obsérvala en distintas horas del día y con las distintas iluminaciones que tendrá la habitación. Así vemos la pintura con todas sus cualidades cromáticas. Las luces LED son las que menos influyen en los colores.
Dicho esto, ya sabéis que a mí siempre me gusta hablar de cosas que son tendencia…
Pues bien.
Esta temporada, el color estrella, dicho entre otros por el señor Pantone, es el Ultra violet (Ultra Violeta (18-3838) )
Ea! Mira a ver si te combina…
Y para finalizar con la pintura de brocha gorda, me gustaría mencionar una corriente que me rechifla, desde que la conozco se me va el ojo y la mano… quiero hacerlo todo así: HALF PAINTED.
Lo explico, aunque si sabes inglés no es necesario: es una tendencia que consiste en pintar la parte inferior de una pared en un color (más oscuro, generalmente), y la parte de arriba en otro.
Se diferencia del zócalo de toda la vida en varias cosas: Primero, en una pared “half painted” el corte de color se sitúa más alto (generalmente a mitad pared) que en una pared con zócalo. Segundo, que con esta técnica no se utiliza ningún otro material que no sea pintura (para hacer un zócalo, generalmente la zona de corte se remarca con madera, o tela). Y por último, que la perfección no es un objetivo en sí misma: si queremos que no sea rectísimo, simetriquísimo, o incluso que se vea algún brochazo, no pasa nada; es más, yo creo que queda genial, porque da más carácter.
Y esta tendencia no sólo se puede aplicar a paredes. En los muebles da muchísimo juego, en patas de sillas o taburetes, mesas o cualquier mueble.
Da efecto de calcetines. A nosotros nos hace mucha gracia. Ahora mismo estamos con un proyecto con este tema, en cuanto lo tengamos lo publicaremos en redes y en la web.
Existe libertad total. Da mucho espacio para jugar con la imaginación y hacer infinitas combinaciones según el efecto que busquemos.
Por último, vayamos con cosas más difíciles, o más para profesionales; aquí entramos nosotros, je.
Hay dos maneras de usar la pintura en decoración en las que nos hemos especializado.
PINTURA MURAL
Una es la pintura mural. Qué cosa tan maravillosa. Si lo pensáis, desde el paleolítico ya empezamos a pintar nuestras paredes y no hemos parado.
Da igual el estilo que elijas (yo no recomiendo escenas recargadas, pero para gustos los colores…). Si das con la ubicación correcta, puedes conseguir un efecto espectacular.
Yo en particular soy fanática de las paredes decoradas con motivos vegetales y tonos toscanos.
Este tipo de pintura también da mucho juego para habitaciones infantiles.
BIOMBOS
Otro concepto decorativo que me encanta es el del biombo.
Generalmente nos cuesta mucho poner un biombo en nuestra vida, pero una vez lo haces, ya no lo quitas. Son muebles con muchísima personalidad, y sí, son tendencia de nuevo.
Los puedes usar como meros elementos decorativos, o sacar partido de su papel funcional (delimitando un área concreta, o para crear un pequeño vestidor en el dormitorio).
Nosotros hemos hecho varios biombos pintados a lo largo de nuestra carrera, y siempre, siempre, siempre, han dado muy buen resultado.
Al hacerlo de cero y diseñarlo para el cliente, tenemos total libertad para elegir el motivo, colores, estilo y tamaño, y se convierte en una pieza totalmente adaptable al entorno en el que va a ir ubicada.
A través del biombo podemos integrar en nuestra decoración guiños, simplemente estéticos, o cargados de significado.
Podemos pintarlos con diferentes técnicas y materiales, forrarlos con telas u otros elementos, e incluso dorarlos; las posibilidades son infinitas.
Y hasta aquí por hoy, porque relamente éste es un terreno en el que nos podemos enredar mucho…
Espero haberos servido de inspiración en caso de que os estéis planteando un cambio en la decoración de vuestra casa.
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